El templo de los elefantes en Chiang Mai: Wat Chiang Man y su energía más antigua
Bueno, hoy salí a caminar, o mejor dicho, a pataperrear, como buena Nadita que soy. Ya sabés cómo soy: veo una calle y allá voy, sin rumbo, pero convencida de…
Bueno, hoy salí a caminar, o mejor dicho, a pataperrear, como buena Nadita que soy. Ya sabés cómo soy: veo una calle y allá voy, sin rumbo, pero convencida de…
Como aprendí que la paciencia puede tener forma humana) En Chiang Mai hay algo que se siente apenas bajás del tuk-tuk: la gente parece tener el alma en modo “slow…
Arranqué la tarde caminando sin rumbo, como siempre, y terminé en un templo que ni sabía que existía: Wat Sai Mon. De esos lugares que parecen llamarte sin decir una…
Hoy salí otra vez a pataperrear por las calles de Chiang Mai, sin mapa, sin rumbo y con esa sensación de que algo lindo siempre aparece. A los pocos pasos,…
Yo iba caminando lo más tranquila, modo exploradora sin mapa, cuando de repente lo veo: un chedi blanco y dorado que brilla como si lo hubieran pulido con rayos de…
Bueno, hoy me levanté con esa necesidad de vivir la vida local posta, posta, posta. Así que me fui al Mororot Market, que es como el Disney de las cosas…
Hoy salí, como siempre, a caminar sin rumbo. Porque si hay algo que me sale bien, es salir a descubrir sin saber qué voy a encontrar. Chiang Mai me encanta:…
Yo pensaba que el Wat Suan Dok iba a ser “otro templo más”. Entrar, mirar, decir “qué lindo”, y seguir camino. Pero no. En cuestión de minutos estaba caminando entre…
Yo llegué a Chiang Mai con la promesa solemne de que esta vez sí iba a descansar. Me había imaginado una versión zen de mí misma: levantándome con el canto…
Yo ya venía caminando por Chiang Mai con ese aire de “ya vi mil templos, qué más puede sorprenderme”. Error. Grave error. Entro a Wat Phra Singh, y ¡pum!… te…